Hoy en día vivimos en un mundo en el que nos hemos separado muchísimo, tal vez demasiado, de lo que es natural. Alimentos industrializados, alteraciones genéticas en las la comida, sobre-explotación en los animales...
Cada vez que compramos productos de una empresa con estos principios, nosotros mismos estamos potenciando la actividad. Pero claro, la mayoría de las veces no somos conscientes de que lo estamos haciendo, no solo por nuestra brutal ignorancia en este campo, sino porque nos engañan en las etiquetas de los productos, y nos lo venden con un "de la mejor granja, con los mejores cuidados, a tu casa". Ingenuos nosotros que no creemos que ese trozo de carne que comemos no ha estado maltratado antes solo porque lo pone en una simple etiqueta... ¡Si lo que importa únicamente es el dinero!
Esto evidentemente no se ciñe a los animales y plantas que comercializan, sino que por la poca higiene que se tiene, la cantidad de químicos que echan a los productos que nos venden es bestial, y ello repercute enormemente en nuestra salud.
Solo cabe preguntarse una cosa: ¿es esta la sociedad avanzada en la que creemos que vivimos?
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